Ven
Me postro a tus pies
desnuda,
sin atavíos
que ensucien mi piel.
Vengo cubierta de margaritas,
flores silvestres
que en el camino
cogí.
Ellas y yo somos para ti.
Ven ábrazame sin miedo
con fervor,
absorto de todo pecado,
de todo dolor.
Ven refugiate a mi regazo
no hay límites,
no hay restricción.
Deposita tu sonrisa
en mi pelo,
en mis ojos,
en mis manos,
en todo lo que soy.
Ábrazame a tu cuerpo
bésame en los labios
con alegría infinita
con la pureza del amor.
Ven quédate junto amí
bebamos este sorbo de vida
que el mañana no existe
y el pasado ya pasó
es este el momento
de nosotros dos.
Cuánto te he esperado
Lo sabe Dios.
Hoy que has llegado
me das la vida
que mi alma siempre soñó.
Suyai Chile 2012
copyright
No hay comentarios:
Publicar un comentario